top of page

Imitando A: Chema Madoz


José María Rodríguez Madoz, o Chema Madoz, nació en Madrid en 1958. En sus primeros años de juventud estudió Historia del Arte en la Universidad Complutense de Madrid, pero un día, con la excusa de un viaje próximo que tenía planeado, se compró una Olympus y empezó a estudiar fotografía paralelamente en el Centro de Enseñanza La Imagen. Luego esa cámara fue reemplazada por una Hasselblad, que es la que continúa usando en la actualidad.

Chema comenzó su carrera como artista fotográfico y en muy poco tiempo desarrolló un estilo que le dio a cada una de sus obras un sello único y personal.

EL PROCESO CREATIVO

Empieza por una idea imaginada y bocetada en uno de sus cuadernos. Esos dibujos le dan una aproximación de cómo será la apariencia final y le permiten comprobar si funcionarían. En su estudio de Galapagar tiene un mundo lleno de objetos que fue guardando a lo largo de los años, donde selecciona los necesarios para construir esa idea.

Trabaja de dos maneras: parte de un objeto seleccionado especialmente, o bien él mismo se dispone a construirlo a partir de otros en un proceso lento pero continuo.

Una vez construido el nuevo objeto pasa a fotografiarlo, frecuentemente con luz natural, logrando imágenes con gran contraste y nitidez, además de armónicas, compositivamente perfectas.

Chema logra imágenes tan increíbles que podríamos pensar que utiliza algún tipo de montaje digital. Sin embargo, todo lo que él fotografía es hecho por sus propias manos.

Una vez fotografiados los objetos éstos vuelven a almacenarse donde estaban antes, incluso son reciclados para nuevas imágenes. Muchas veces se lo ha invitado a exponer esas obras escultóricas junto con las imágenes, pero él prefiere no hacerlo.

Sus creaciones son imágenes simples. Con la sencillez y perfección de la técnica transmite mensajes impactantes, que invitan al espectador a echar una segunda mirada, y una tercera… No en vano decide utilizar película blanco y negro.

En el caso de las fotos de Chema el color no haría más que distraer la atención y quitarle foco al significado de la obra.

Sus blancos, negros y grises le dan mayor intensidad a la imagen.

Ese orden impuesto por el minimalismo hace más fácil la transmisión del mensaje, ya sea una ironía o una metáfora. Y cuando algo está tan despojado de cosas, cuando es tan asequible de observar lo inevitable es captarlo con mayor fuerza.

Para esta práctica hemos realizado yo y mi compañero Toni una fotografía imitando a este Gran Fotógrafo como es Madoz, en el que hemos utilizado una cuchara y un tenedor para crear una pajarita


Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
No hay tags aún.
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page